El lunes (6/2), el ministro de Deportes de Turquía, Mehmet Kasapoglu, decretó la suspensión inmediata de todas las competiciones deportivas en el país tras el terremoto de magnitud 7,8 que devastó la nación. La tragedia, que también ha afectado a Siria, ha dejado más de 2.400 muertos y miles de desaparecidos y heridos.
En cuanto se anunció la suspensión de la liga turca, los principales clubes del país empezaron a movilizarse para recaudar donativos y dar cobijo a los afectados por el terremoto. El Galatasaray ha abierto las puertas de su gimnasio y acoge a las personas desplazadas por la tragedia.
El Fenerbahçe, con el entrenador portugués Jorge Jesús y varios jugadores brasileños como Willian Aro, y el Besiktas también han abierto sus puertas para recibir y acoger a los necesitados tras el terremoto.
La tragedia en el deporte
El portero del Malatyaspor, club de la segunda división turca, ha fallecido a consecuencia de la catástrofe natural. Eyp Trkaslan tenía 28 años y fue encontrado sin vida entre los escombros, según publicó el propio club.
Otro jugador afectado por la catástrofe es el ghanés Christian Atsu, ex jugador del Chelsea y actual jugador del Hatayspor, que se encuentra entre los desaparecidos, según el Daily Mail.
El sitio web Fotomac, por su parte, ha sabido que todo un equipo femenino de voleibol se encontraba en un edificio que se derrumbó con el seísmo. En total, faltan 14 jugadores del Hatay y, según los responsables del club, aún no hay información sobre ellos.