Gilbert Arenas ha criticado con dureza (aunque quizá no del todo infundada) ciertos aspectos del juego de Giannis Antetokounmpo.
Inicialmente, el ex de los Washington Wizards habló del fenómeno griego en su podcast.
No entiende el juego. Ganó un título, pero en mi opinión no entiende lo que debe hacer para convertirse en una leyenda. No sabe cómo mejorar, cómo entrenar para mejorar su potencial físico.
Palabras que han dado la vuelta a la red, recibiendo muchas críticas. Por ello, Arenas publicó algunas aclaraciones a través de un post en su perfil de Instagram, poniendo en tela de juicio a Kobe Bryant y Michael Jordan que, según él, a diferencia de Antetokounmpo, han crecido constantemente a lo largo de sus carreras.
¿Ha añadido alguna vez un arma a su juego? ¿Han aumentado sus porcentajes desde el arco y en el tiro libre? Físicamente se ha hecho más fuerte, absorbe mejor el contacto y por eso han subido sus porcentajes de dos. Pero hoy en día sigue teniendo los mismos defectos que cuando era novato, por eso digo que debería concentrarse más para saber dónde mejorar.
Al día siguiente, Arenas retomó indirectamente el tema al publicar el informe de la cuenta de Stephen Curry de la universidad, en 2009. El documento señalaba que el jugador carecía de atletismo y explosividad, que era incapaz de rematar en la plancha y que debía mejorar su manejo del balón.
Leyendo este informe de ojeo cualquiera diría que Curry demostró que estaban equivocados, de hecho en su momento los supuestos «haters» tenían razón. Steph tomó el ejemplo de estas críticas para encerrarse en el gimnasio y mejorar. Día tras día se ha convertido en uno de los mejores manejadores de balón de todos los tiempos y en uno de los bases más fuertes a la hora de ir al hierro con las dos manos. Ya no tiene esos defectos y ha ganado dos MVP porque se lo ha currado, además de engordar 10 kg de masa muscular en el gimnasio el año pasado.
Por ello, Arenas citó a Curry diciendo que siempre hay que mejorar. Otra indirecta a Antetokounmpo, a sus defectos no cambiados y a la gente que criticó su opinión.
